Unas mejillas sonrosadas son símbolo de
salud y belleza.
El rubor, blush o también llamado colorete,
tiene como función de agregarle color y ayudar a definir la estructura facial
añadiendo belleza. Pero parece
que el rubor ocupa lugares secundarios, al menos frente a productos como una
buena base o el lápiz labial correcto al momento de maquillarnos.
Asi como le
dedicamos tiempo a ver que base nos queda bien, también es bueno dedicarle unos
minutos e investigar cómo elegir el mejor rubor.
El rubor adecuado
puede hacer maravillas por ti o convertir tu maquillaje en un desastre. Puede
ser sin lugar a dudas la diferencia entre un rostro fresco y pulido y verte
como un pálido personaje de una película de vampiros.
Sabes que tipos de rubores existen?
Rubor en crema
El rubor en crema o rubor en mousse es uno de esos productos de
maquillaje no tan
comunes que pueden intimidarnos simplemente porque tenemos miedo de no saber
colocarlo correctamente.
Este tipo de rubor es excelente para el cutis con
tendencia a la resequedad.
Los rubores en crema se deslizan sobre la piel entregando color
y aportando humedad a la zona de las mejillas. Es un cosmético que bien
aplicado luce muy bonito, pues hace que el rostro se vea luminoso, hidratado y
juvenil, con un acabado muy natural, al punto de que no pareces maquillada.
Rubor en gel
Es
un producto bastante similar al rubor en crema. El rubor en crema te garantiza
un acabado radiante y, desde mi punto de vista, es un poco más sutil que el
rubor en crema, aunque sí otorga ese brillo juvenil.
Rubor en polvo
Los
rubores en polvo suelen tener un acabado mate y es ideal para las pieles mixtas
a grasas, y si quieres un toque de brillo existen en el mercado productos de
rubor en polvo con brillo o efecto bronceante. Recomiendo el uso de rubor en
polvo para básicamente todo tipo de pieles. Su acabado suele ser más sutil que
con otros tipos de rubor lo que va perfecto con casi todos los estilos de
maquillaje.
Como elegir el rubor según color de
piel
- Pieles claras: Tonos
ciruelo, vino, carmesí, color rosa, los pasteles, melón, lila, terracota,
durazno y rosa.
- Piel morenas: Tonos rosa
oscuro, coral, rojo quemado, bronce, marrón.
- Piel dorada: Tonos tostados,
cobrizos y naranjas.
Cómo seleccionar el rubor
Con
tantos colores y texturas en cosméticos puede ser confuso seleccionar los
mejores productos para tu piel. Lee atentamente para que compres sea el
correcto.
- El truco más común para
elegir el producto adecuado es que te pellizques la mejilla suavemente y
observa el color. Justamente ese es el ideal para tu rostro.
- Si tienes las mejillas enrojecidas por acné o rosácea la selección del color puede ser más difícil. En estos casos te aconsejo usar base, polvos o un corrector para emparejar la piel y cubrir el enrojecimiento. Si el enrojecimiento no está cubierto el rubor no se ve bien.
Tips para elegir el color de rubor
que más te convenga:
- Si tu piel es clara, te convienen
los tonos rosa y durazno. Si es más morena opta por un tono parecido al
vino tinto.
- Para dar con el color ideal
debes recordar de qué color queda tu rostro después de un rato de
ejercicios aeróbicos. Justamente ese será el tono ideal para ti.
- Cuanto más oscura sea tu
piel, más oscuro debe ser tu rubor.
- El rubor debes comprarlo y
elegirlo a la luz del día.
- Opta por colores naturales
para el día y otros más fuertes para la noche.
- Es clave que combines tu
lápiz labial con el color correcto del rubor. Por ejemplo, si
tus labios los pintas de rojo, tu rubor deberá ser un tono rosa muy suave.
- Es fundamental que antes de
comprarlo, lo pruebes. A simple vista puede ser muy lindo, pero lo
importante es cómo se vea en tu rostro.